Protecciones colectivas
Las protecciones colectivas, como su propio nombre indica protegen a todos los trabajadores a diferencia obviaente de las protecciones individuales. En todos los casos las protecciones colectivas tienen preferencia respecto a las individuales. A continuación comentamos algunas de las que se utilizan de forma más común:
Marquesinas o viseras de protección, están fabricadas con materiales rígidos y resistentes y se colocan en zonas de paso de operarios donde existe riesgo de caída de materiales y otros objetos desde niveles superiores.
Redes de protección frente al riesgo de caída desde los bordes de forjado. Son redes conocidas comúnmente como redes tipo horca. Se deberán utilizar siempre redes normalizadas de acuerdo con la legislación vigente y deberán ser montadas de acuerdo a dicha legislación, teniendo en cuenta lo previsto por el fabricante y por personal cualificado para hacer dicho montaje.
Barandillas para la protección de huecos y bordes de forjado, su altura mínima es de 90 centímetros, con un listón intermedio y rodapié con una altura suficiente (recomendado 15 centímetros) sobre la superficie de trabajo, todo pensado para evitar la caída de materiales. Las barandillas se fabricarán con materiales resistentes. No está permitido y además es peligroso, utilizar materiales como cuerdas, cintas, cadenas, etc.
Protecciones colectivas para la protección de huecos de forjado. En este caso, existen diferentes soluciones que pueden utilizarse:
o Utilización de tablones de madera sana, resistente y estables y convenientemente asegurados de forma que no puedan desplazarse y perder así su función básica que es proteger a los trabajadores.
o Utilización de barandillas de manera que éstas cubran todo el perímetro del hueco.
o En ocasiones puede utilizarse el propio mallazo del forjado cubriendo éste todo el hueco.
Redes horizontales, que se utilizan para impedir las caídas a distinto nivel de operarios desde el propio encofrado mientras se llevan a cabo los trabajos de colocación del mismo. Estas redes también se utilizan mucho en la protección de huecos de forjado.
Protección de armaduras. Las armaduras, son muy peligrosas porque pueden provocar tropiezos o cortes pero también daños muy graves e incluso la muerte si cae un trabajador sobre las mismas. Por eso es muy importante protegerlas con tapones (“setas”).
Entibado de zanjas. En la ejecución de zanjas en la obra, a veces es necesario que los trabajadores realicen tareas en el interior de las mismas, en estos casos hay que proteger a los operarios del riesgo de desplome de las paredes de la zanja. Para cubrir este riesgo, hay que utilizar sistemas de entibado que impidan posibles desplomes. El Plan de Seguridad Y Salud de la obra deberá prever la colocación de estos sistemas cuando sea necesario.